PASIÓN EN LA ORACIÓN
- Alejandro Burrone
- hace 12 horas
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PASIÓN EN LA ORACIÓN
Bienvenidos al Devocional Despertando Con Dios del 4 de Septiembre.
Tema: FELICIDAD. Clave: FERVOR.
Mensaje del día: La pasión en la oración refleja nuestro compromiso y conexión con Dios.
Basado en el versículo bíblico de COLOSENSES 4:2 que dice: Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias.
Enseñanza: La dedicación ferviente en la oración transforma nuestra vida y fortalece nuestra relación con Dios.
Experiencia Bíblica: Daniel, conocido por su fervorosa vida de oración, persiguió a Dios aún en la adversidad, mostrando cómo su pasión le guió a realizar grandes cosas para el pueblo de Israel.
Vivencia reciente: Durante un periodo de crisis personal, Maikel encontró consuelo en la oración ferviente, lo que lo llevó a una mayor intimidad con el Padre y a poder enfrentar lo que venía.
Oración: Señor, infunde en mí un fervor renovado para la oración, guiándome a buscarte en cada momento.
Acción: Dedica tiempo específico para la oración ferviente, permitiendo que tu pasión te acerque más a Dios y a Su propósito en tu vida.
Reflexión: La pasión en la oración no solo nos transforma, sino que también sorprende al abrir caminos y respuestas que solo lo divino puede proporcionar.
Estudiemos en detalle las siguientes 2 Concordancias Bíblicas para ampliar el concepto:
1RA DE TESALONICENSES 5:17
Orad sin cesar.
FILIPENSES 4:6
Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.
Eco Espiritual:
La oración ferviente es el latido del alma que busca a Dios con entrega total. Cuando elevamos palabras con pasión y gratitud, nuestro espíritu se fortalece y nuestra fe se enciende como fuego vivo. La intimidad con el Padre se profundiza, transformando la angustia en paz y la incertidumbre en confianza. Cada momento de oración apasionada abre caminos que antes parecían cerrados, recordándonos que el poder está en Su presencia. Así, la pasión en la oración se convierte en fuente de vida, esperanza y plenitud eterna.
Dios nos bendice hoy y siempre.
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