PODER DE DIOS
- Alejandro Burrone
- 13 sept
- 2 Min. de lectura
PODER DE DIOS
Bienvenidos al Devocional Despertando Con Dios del 13 de Septiembre.
Tema: DISCIPLINA. Clave: OMNIPOTENTE.
Mensaje del día: El poder de Dios, omnipotente y sin igual, es el cimiento de nuestra fe, capaz de superar cualquier circunstancia.
Basado en el versículo bíblico de LUCAS 1:37 que dice: Porque nada hay imposible para Dios.
Enseñanza: La omnipotencia de Dios se manifiesta en su capacidad de obrar más allá de nuestras limitaciones, asegurando que nada es imposible para Él.
Experiencia Bíblica: Cuando Moisés enfrentó al faraón para liberar a los israelitas, fue el poder de Dios lo que partió el Mar Rojo, demostrando su omnipotencia al salvar a su pueblo en un acto milagroso y sin precedentes.
Vivencia reciente: En una comunidad rural, se cuenta la historia de un niño sanado milagrosamente de una enfermedad terminal. Este suceso sorprendió a médicos y familiares, fortaleciendo la fe de muchos y recordándoles que el poder de Dios desafía cualquier diagnóstico e imposibilidad humana.
Oración: Señor, fortifica mi fe diariamente con el poder de tu omnipotencia, para que pueda vivir en confianza de tus obras poderosas.
Acción: Permanece confiado en que el poder de Dios es suficiente para cumplir lo inimaginable en cada ocasión y necesidad.
Reflexión: Reflejar en el poder divino nos recuerda que sus caminos, aunque misteriosos, son siempre perfectos y sorprendentes. Permitir que este poder guíe nuestras vidas nos da una esperanza inquebrantable y una fe que desafía lo imposible.
Estudiemos en detalle las siguientes 2 Concordancias Bíblicas para ampliar el concepto:
JEREMÍAS 32:27
He aquí, yo soy el Señor, el Dios de toda carne; ¿acaso hay algo demasiado difícil para mí?
SALMO 147:5
Grande es el Señor nuestro, y de mucho poder; su entendimiento es infinito.
Eco Espiritual:
El poder de Dios es la roca firme donde descansa nuestra fe, capaz de abrir caminos donde solo vemos imposibles. Su omnipotencia trasciende nuestras limitaciones y nos recuerda que nada está fuera de su alcance. Cada milagro, grande o pequeño, es una señal viva de que su mano sigue obrando en nuestro favor. Confiar en ese poder nos libera del temor y nos impulsa a creer más allá de la lógica humana. Así, la fe se fortalece al saber que el Dios omnipotente es quien sostiene y guía cada paso de nuestra vida.
Dios nos bendice hoy y siempre.
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