PRINCIPIOS ÉTICOS
- Alejandro Burrone
- 18 sept
- 2 Min. de lectura
PRINCIPIOS ÉTICOS
Bienvenidos al Devocional Despertando Con Dios del 19 de Septiembre.
Tema: DISCIPLINA. Clave: MORAL.
Mensaje del día: Vivir de acuerdo con principios éticos refleja nuestra moralidad y compromiso con los valores divinos.
Basado en el versículo bíblico de MIQUEAS 6:8 que dice: Haz justicia, ama la misericordia, y humíllate ante tu Dios.
Enseñanza: La verdadera moralidad se expresa en la justicia, la misericordia y la humildad, siendo estos principios éticos fundamentales en la vida del creyente.
Experiencia Bíblica: Daniel, un joven hebreo en Babilonia, vivió conforme a sus principios éticos. Aunque estuvo lejos de su hogar, se negó a contaminarse con alimentos reales, permaneciendo fiel a sus convicciones y siendo bendecido por Dios con sabiduría y prominencia.
Vivencia reciente: Alicia, una ejecutiva, decidió implementar prácticas de justicia y transparencia en su empresa, inspirada por sus principios de fe. Esto no solo fomentó un ambiente laboral ético, sino que también mejoró la moral del equipo y demostró que la moralidad trae prosperidad.
Oración: Dios justo y misericordioso, guíame para vivir de acuerdo con tus principios, demostrando justicia, compasión y humildad en todas mis acciones.
Acción: Cultiva y practica diariamente los principios éticos de justicia, misericordia y humildad en tus interacciones y decisiones, honrando a Dios.
Reflexión: En un mundo donde las líneas morales a menudo se desdibujan, mantener nuestros principios éticos se convierte en un acto de valentía y fe, sorprendiendo a los demás con el impacto duradero de la verdadera integridad.
Estudiemos en detalle las siguientes 2 Concordancias Bíblicas para ampliar el concepto:
PROVERBIOS 21:3
Hacer justicia y juicio es a Jehová más agradable que sacrificio.
SALMO 25:21
La integridad y la rectitud me protejan, porque en ti espero.
Eco Espiritual:
Vivir guiados por principios éticos nos conecta con lo más profundo de nuestra moral y nos invita a actuar con justicia, compasión y humildad. Cada decisión que tomamos desde la integridad refleja nuestra fe y deja huella en quienes nos rodean. La verdadera disciplina no se impone, sino que nace del compromiso de vivir coherentemente con nuestros valores. Al mantenernos fieles a estos principios, descubrimos fortaleza interior y la capacidad de transformar nuestro entorno, demostrando que la ética y la fe son fuerzas que construyen vidas y comunidades significativas.
Dios nos bendice hoy y siempre.
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